Viaje al centro de la tierra. Por Rocío Santos Duque (3º ESO)
VIAJE AL CENTRO
DE LA TIERRA. JULIO VERNE
Dentro del género de literatura de Viajes hay un clásico al que hacemos hoy eco, gracias a la donación de la Editorial edebé. Merece la pena ojear los títulos de esta Colección pues han rejuvenecido con el atractivo formato de la edición, una obra publicada por primera vez en 1864.
Julio Verne es el gran autor de la novela de ciencia, un género que utiliza los conocimientos de su época para desarrollar sus tramas. Julio Verne nunca viajó a Islandia pero sin embargo sitúa allí la trama de su novela. Nos trasportamos a bellos paisajes de la península de Snæfellnes, al oeste de la isla, con un enorme valor geológico y biológico.
Podríamos analizar cómo su obra ha despertado vocaciones científicas, porque muchos personajes ilustres han declarado ser hijos de sus novelas; por ejemplo, Yuri Gagarin, el primer ser humano que salió al espacio exterior. En este mes de noviembre celebraremos en Fuenllana la Semana de la Ciencia, y nos viene al caso este libro escogido al azar por Rocío Santos para su comentario y recomendación. ¡Gracias Rocío!
¿Cuántas veces hemos visto una de las famosas
obras de Verne en la biblioteca, estanterías de nuestra casa... mientras que
buscábamos algún libro para leer? Casi millones ¿Y cuántas personas lo hemos
cogido? Casi ninguna, se podría decir. Viaje
al centro de la tierra, no nos llama en un principio. “Bah, ya lo leeré más
tarde”, nos decimos o, directamente, ni tratamos de engañarnos: “ahí te quedas,
ni pienses que te voy a leer”. Y cogemos otro. Siempre así.
No obstante, tal vez lo cojas en algún momento.
Lo abrirás y verás (seguramente) sus capítulos y páginas frunciendo el cejo sin
estar seguro. Después, sin estar convencido del todo, empezarás a leer.
Una página, otra… y, de repente, te encuentras sin
despegar la mirada del libro.
Alex, el sobrino del profesor Lidenbrock,
descubre la clave para leer el pergamino que su tío ha traído a su casa. Al
principio se niega a contarlo, porque sabe que, si lo hace, su tío le obligará
a embarcar mas al final se lo dice. Tal como predijo, su tío y él van a
Islandia para buscar la entrada del
camino al centro de la Tierra… e ir a ella.
La trama se crea de forma lenta para mi gusto; no
obstante, no niego que se torne aburrido… es más, al contrario, se torna cada
vez más interesante con giros inesperados que nos sorprenden. Te mantiene con
una incógnita que te mantiene en tensión más de una vez y hace que no puedas de
dejarlo. ¿Morirán en el intento? ¿Fue un mísero engaño? ¿Qué…? Y así sigue
nuestra lista.
Podemos ver que los personajes, como el ser
humano en sí, buscan sobresaltar, ser aceptados… y, en parte, no defraudar… y
estar con quienes amamos. La última, sobretodo, es lo que impulsa a Alex,
nuestro protagonista. Estar con su amada. Cada uno de ellos tiene una meta que
supera a todo para ellos y hacen todo lo posible, por ello, a seguir adelante y
no tirar la toalla. Nunca.
Rocío Santos Duque
3º ESO C
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